Gran Bretaña acaba de anunciar un plan que promueve el uso de energía limpia en los países en desarrollo. La originalidad de esta iniciativa radica en su financiación: cada vez que un ministro o un miembro del gobierno viaje en avión, su ministerio deberá pagar un impuesto. Este nuevo plan se pondrá en marcha el próximo mes con al menos tres ministerios participantes, el "Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales" (DEFRA), el Ministerio de Relaciones Exteriores (FCO) y el "Departamento de Desarrollo Internacional" ( DFID). Estos departamentos son aquellos cuyos empleados viajan más. Podrían financiar este fondo por una suma de 500.000 libras esterlinas cada año. Una organización independiente se encargará de calcular el monto adeudado por cada viaje en función del número de kilómetros recorridos y la altitud.
De hecho, la comunidad científica está de acuerdo en que una aeronave en servicio contamina más a gran altura que a baja altitud. Esta financiación se utilizará para proyectos como cocinas solares en India o mejorar el sistema de aislamiento en hogares en Sudáfrica. Los ecologistas dicen estar satisfechos con una medida que es responsable de las emisiones de CO2.
El "Departamento de Transporte" (DfT) no forma parte oficialmente de este nuevo plan hoy. Algunos altos funcionarios de la administración del Reino Unido no desean llamar la atención sobre el papel del transporte en el cambio climático, ya que las emisiones de automóviles y aviones están aumentando.
DEFRA, sin embargo, espera involucrar al DfT lo antes posible. John Gummer, exministro conservador de Medio Ambiente, dijo que la idea era excelente e innovadora, sin embargo, dijo, esto no debería enmascarar el aumento de emisiones del sector de la aviación y la inacción del gobierno en torno al problema.
fuente: http://news.bbc.co.uk